Huyendo de Innsbruck hacia el Castillo de la Bella Durmiente

Si algo aprendí este día es que las reservaciones son muy importantes! Buscamos en las páginas principales para encontrar hostales baratos y no encontramos nada, decidimos irnos así a nuestro siguiente destino: Innsbruck. Para llegar a dicho destino desde Salzburgo se entra en territorio alemán, cuyas carreteras son gratuitas y sin límite de velocidad, además de que el paisaje es increíble.

Rumbo al mercado navideño

Estuvimos buscando hostal unos cuantos kilómetros antes de llegar y o estaban cerrados o los precios sobrepasaban los 60 euros por persona, demasiado caro! Así que sin hospedaje nos dirigimos al centro para iniciar el recorrido. Innsbruck es hermoso! Y el ver todas las montañas que la rodean con los restos de las primeras nevadas es toda una experiencia. 

En este lugar vi el único mercado navideño de todo el viaje, la mayoría inician la primer semana de diciembre, pero aquí a mediados de noviembre ya había iniciado, el propósito de estos mercados es vender comida y bebida caliente para que la gente salga en temporada de mucho frío. Subimos a la torre ( 3 euros) para disfrutar de una panorámica y en la escalera hay muchos mensajes escritos en las paredes, uno llamó mucho la atención, la frase más típica de los mexicanos: VIva México Cabrones! me encantó!

Los atractivos que visitamos fueron la calle María Teresa, que es donde se encuentra el mercado navideño, la torre y es la principal calle comercial de la ciudad además de muy bella y donde te tomas la foto de rigor ;), en ella se encuentra la columna de Santa Ana (Annasaüle) que debe ser lo más fotografiado del lugar, pues el paisaje al fondo es hermoso. El museo tirolés de folclore y arte, la casa Habsburgo, el arco del triunfo y la Iglesia de la corte, la cual es de estilo gótico y tiene unos murales preciosos.

Columna de Santa Ana

Innsbruck es muy bello, caminar y caminar se disfruta muchísimo, y caminando fuimos preguntando precios, los cuales estaban elevadísimos! Así que decidimos no quedarnos en esa ciudad austriaca y salir hacia nuestro siguiente destino, el Castillo de Neuschwanstein cerca de la frontera pero del lado alemán.

Desde la Torre

Si las carreteras anteriores eran bellas, estas fueron hermosas!!! subes y subes hasta encontrarte con las montañas nevadas de frente! En fin, llegamos alrededor de las 3 de la tarde, hay un estacionamiento público (5 euros) y tienes que comprar los boletos por horario en la taquilla que se encuentra en el pueblo, no se pueden comprar en la entrada del castillo! Es muy importante!

Castillo de Neuschwanstein (Nuevo Cisne)

La primera impresión que tuve fue de decepción, de lejos se ve muy pequeño el castillo y no impone, parece de juguete, la entrada cuesta 12 euros. Puedes subir muy "fashion" en un carruaje tirado por caballos o hacerlo a pie (gratis jejeje) son alrededor de 25-30 minutos de subida de pendiente regular, llegas un poco cansado pero nada no soportable. Conforme te vas acercando entiendes por que fue nominado como una de las nuevas 7 maravillas del mundo, está increíble! Ya en la entrada ves la majestuosidad de la construcción, un imperdible.

Castillo de Hohenschwangau

Vas entrando en grupos y desgraciadamente las fotos están prohibidas, pero el interior es hermoso, con varios pasajes secretos y un estilo muy diferente. El rey Luis II de Baviera fue quien lo construyó, al padecer una enfermedad mental se recluyó en su castillo, lo sacaron y fue encontrado muerto días después, desgraciadamente el castillo nuca se concluyó, aún así las habitaciones completas valen mucho la pena, fue nominada como finalista a formar parte de las nuevas 7 maravillas del mundo.

Desde el mirador

Al terminar el recorrido fuimos al puente y la cascada, ya la noche estaba cayendo pero la vista desde ahí es muy buena, aunque como me dan miedo las alturas solamente lo crucé rápidamente jejeje. Bajamos al estacionamiento en grupo y de ahí partimos hacia Münich.

Entrada al Castillo

Si llegas temprano también se puede acceder al Castillo de Hohenschwangau con un precio por los dos de 19 Euros, la entrada al castillo se encuentra justo por arriba de donde se venden los boletos, pero al no tener tiempo suficiente solamente nos decidimos por el primero.

Desde la cascada

Tardamos alrededor de una hora y media, y como no teníamos hostal nos la pasamos buscando un café barato con wifi, como no encontramos nada, nos estacionamos frente a la plaza donde se celebra el October Fest y caminamos un poco, encontramos una red gratis y a buscar! Y como Dios nos quiere mucho, encontramos el hostal más barato a solo dos cuadras de donde dejamos el coche, el Smart Stay Munich, pagamos 18 Euros por habitación compartida (8) la primera noche (por ser sábado) y la segunda a 12 euros.

Cerveza sabor lima-limón en el hostal, no me gustó

Fuimos a cenar al Lindwurmstüberl donde venden comida bávara muy rica y a precio accesible y cerveza de la casa deliciosa! Como estábamos tan contentos de por fin llegar a Münich se nos pasaron las copas y terminamos tomando en el hostal. Dormí mejor que nunca jejeje.